martes, 12 de marzo de 2013

Enfermedades

Algo ha venido a romper nuestra calma. El papá de Leo y Nora ha pasado una gripe muy fuerte de la que aún no se ha recuperado del todo. Han sido 6 días de fiebre alta que han dejado daños colaterales: Leo lleva enfermo desde ayer y nosotros hemos tenido una discusión muy fea.

Es la primera vez que Leo tiene fiebre tan alta, hasta 39,1. Empezó ayer por la mañana. Anoche dormí yo sola con los dos y el papi se fue a la habitación de Leo. Lleva haciéndolo desde que se puso tan malito, para evitar pegárselo a los niños. Ya veremos si Nora supera la segunda prueba, me da un poco de miedo que pille lo mismo que ellos, con esa fiebre tan mala. 

Leo había empezado a querer estar en su cama por las noches, aunque acompañado. Cuando nos empezamos a pantear cómo enfocar la nueva situación llegaron los virus. Así que lleva ya  más de una semana durmiéndose en su camita, y en el primer despertar cambiándose con su padre. También había empezado a aguantar más tiempo dormido antes de ese primer despertar.

Nora sigue durmiendo muy bien por las noches, apenas se despierta para mamar. Pero anoche, por ejemplo, no cayó hasta las 3 de la madrugada. No es lo habitual, pero suele estar despierta hasta tarde. Ahora está dormida en el fular y estoy esperando que empiece a agitarse y yo tenga que levantarme a pasear. 

Por el día ha empezado a dormir poco, a ratitos. Y se queja bastante, suele estar inquieta y hay que tenerla en brazos, concretamente boca abajo en nuestro antebrazo mientras nos movemos. Pero algún rato hay que nos regala en el que está tranquilita mirándolo todo desde el sofá o la hamaca o desde nuestros brazos pero quietecitos.

Esta semana ha sido horrible, sin tiempo para nada. En general está siendo así desde que ella nació, sin tiempo para nada. Está siendo mucho más difícil que cuando nació Leo, aunque se supone que hemos superado lo de ser primerizos, y es cierto que estamos más relajados con ella, pero a pesar de haberlo leído 200 veces y de que me lo dijeran otras 200, no me imaginaba que esto sería así. ¡Y eso que la mayoría de comentarios los recibía de madres que llevaban a sus mayores a la guarde o al cole! Estar con los dos todo el día... te deja con la sensación de que no has hecho nada, aunque realmente no has parado. Este post, por ejemplo, ha sufrido ya tres interrupciones y ahora lo estoy acabando porque mi chico ha cogido a Nora en brazos. Y porque Leo está durmiendo. (Nota: cuatro interrupciones!! Leo se ha despertado).

Por supuesto no estoy sola, el papi está en casa casi el 100% del tiempo, y los cuatro abuelos a 10 minutos y con mucho tiempo y ganas de estar con sus nietos. Sin nada de ayuda, creo que no podría y me habría planteado seriamente meter a Leo en una guarde unas horas. Pero lógicamente, a pesar de la ayuda son muchas horas al día con los dos, prácticamente siempre, y los dos son muy demandantes, ella por ser lo que es, un bebé de apenas dos meses, y Leo... por ser Leo.

De momento nos conformaremos con que la fiebre no nos dé algún susto y si Nora se librara sería maravilloso. Y ya vendrán semanas mejores, sin virus, con buen tiempo, sol, planes, buen humor y tiempo para escribir en el blog.

4 comentarios:

  1. Ay, cómo lo siento!!! Espero q se recuperen pronto.

    La peque no ha tenido fiebre???

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  2. Uff nena, ánimo, yo cruzo los dedos por que Nora no se ponga mala, hay días que no soy yo

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  3. Es muy difícil, y estar con dos todo el día súper agotador, ojalá pronto llegue el buen tiempo, podáis salir y relajarte algo más.
    un beso enorme, preciosa, eres una súper mami!

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