Ya conté aquí que Leo
había empezado a morderme. Por desgracia sigue haciéndolo, aunque
no muy a menudo. Es curioso pero sé exactamente cuándo va a
hacerlo, y me doy cuenta casi desde el principio de la toma. Él sabe
perfertamente que no está bien, yo le regaño y me enfado mucho, le
digo que ya no va a haber más teta si sigue haciéndolo, y parece
que va aceptando poco a poco la regañina, con cara de resignación.
Últimamente, siempre por las noches cuando le estoy durmiendo, si me
muerde y le regaño deja pasar un tiempo y después me la vuelve a
pedir tímidamente y especificándome que lo va a hacer “despacio”.
Él dice “despacio” con un gesto de la mano, como si dijera
“párate”, y la mueve lentamente. Me aguanto la risa porque
además pone cara de arrepentido... ¡la madre que le trajo!
No sé por qué lo hace,
me preocupa un poco pero ya lo he asumido. Aparte de que no lo hace a
menudo, también está el factor de que ya casi no mama, ni mordiendo
ni sin morder. Esto me preocupa más.
Creo que ocurre desde
hace unas tres semanas. Quizá mi producción ha bajado en picado. Yo
no siento que él mame igual que siempre, no le oigo ya tragar, no
oigo nada líquido, sólo succión “vacía”. Me aprieto y no sale
nada, la última vez una gotita, hace una semana o poco más.
De repente me di cuenta
de que mi hijo no mamaba por el día. ¡Con lo que ha sido él! Y así
lleva estas tres últimas semanas, mamando en la camita para
dormirse, eso sí, a eso de momento no renuncia. Y también en los
despertares. Y nada más. Para la siesta tampoco. De vez en cuando me
pide teta, se la saco, él se acerca, abre la boca, y antes de hacer
succión se aparta riendo, como diciendo: ¡que noooooo! Nos
reímos los dos y me la guardo. La única excepción ha sido hace
unos días, que ha estado malito con fiebre y sí me ha pedido varias
veces durante el día, pero apenas mamaba unos segundos y ya.
Además, ha empezado a
despertarse menos por las noches, casi siempre tiene 2 despertares,
como mucho 3. ¡Aguanta 5, 6, 7 horas seguidas! ¿Tendrá algo que
ver? Cuando se despierta sigue pidiéndome teta, así que lo dudo un
poco. Siempre he estado bastante convencida de que los despertares de
mi hijo no eran para mamar. Me inclino más a pensar que es
casualidad, que su sueño va madurando poco a poco (de hecho Leo ha
ido evolucionando de una forma muy muy progresiva y lenta en este
aspecto, a lo largo de los meses). Pero no sé, quizá sí tenga que
ver algo.
Ahora se toma un vaso de
leche al acostarse, me lo llevo a la cama junto con el agua (pide
leche y teta, o teta y leche); y otro en su segundo despertar, entre
las 6 y las 7 de la mañana normalmente (a veces más tarde, a veces
más temprano). A veces se toma los dos vasos enteros y a veces sólo
la mitad de cada uno, pero antes de esto Leo no tomaba nada de leche.
Nada de lacteos. Es increible cómo está cambiando todo esto en
menos de un mes.
Me da mucha pena que se
destete, aunque yo apuesto por que no lo hará. Pero esta noche me ha
dado por recordar cuando mamaba y yo le oía tragar, cuando se
concentraba en tomar leche y leche y leche... y yo le miraba y le
acariciaba. Y me pedía 8 veces al día y eso me tranquilizaba un
montón porque del resto de comida sólo picoteaba (por cierto, esto
no ha cambiado mucho, la verdad). Y ahora, estando incluso malito,
apenas le ha dado un par de chupaditas a la teta...
Si pienso en el tandem me
agobio un poco, pero si pienso en que dentro de poco mi niño no me
va a pedir teta más, me entran ganas de llorar.