jueves, 11 de octubre de 2012

25 semanas... ¡y avanzando!

Avanzando a duras penas, pero avanzando. Me cuesta mucho escribir porque cuando encuentro tiempo sólo quiero (o más bien sólo puedo) tirarme en el sofá y leer. Pero hoy estoy un poco más descansada y voy a aprovechar antes de irme a la cama. 

Sigo cansada, agotada, derrotada... Me fatigo a los 10 minutos de empezar cualquier actividad, me falta el aire, me duele la barriga, me mareo, me duele la cabeza... Ya he empezado con ardores y se han unido unos picores un poco desagradables. !Un cuadro! Para colmo Leo lleva malito desde hace unos días, el lunes vomitó un poquito y decía que tenía pupa en la tripa. Desde las 6:30 de la mañana nos tuvo en pie y yo me puse malísima del puro cansancio, con ganas de vomitar, náuseas y todo. Parecía que se había quedado en nada pero comía más bien poco y esta mañana ha vuelto a vomitar, esta vez un montón, hemos tenido que meterle a él en la bañera y la funda del carrito a la lavadora. Apenas ha comido hoy. Parece que le sienta mal la leche, porque las dos veces que ha vomitado ha sido después de tomarse su vaso de leche de por la mañana. Lo suele pedir tempranito y se lo llevamos a la cama. Muchas veces vuelve a dormirse y luego cuando se levanta se toma la fruta y las tostadas. A ver esta madrugada cuando lo pida, ¡miedo me da el berrinche que se va a pillar si no se lo damos!

Hoy ha dormido dos horas y media de siesta, y yo me he unido a él cuando llevaba sólo una hora, así que he dormido una hora y media que me ha sentado de lujo. Por la mañana no hemos salido y ha estado bastante tranquilito, y por la tarde se lo han llevado mis padres así que estoy bastante despejada ahora. Mal momento porque mañana me levanto a las 7 y poco para estar en el hospital a las 8: tengo los análisis del segundo trimestre y la sobrecarga de glucosa, la de tres horas, otra vez. Supongo que Leo se despertará cuando yo me levante y ya no se volverá a dormir, así que le tocará al papi lidiar con la fiera, sus llantos, su "mamáaa", su "tetaaa"... Pobres, los dos.

La nena sigue dando patadas, o cabezazos, o lo que sea, a mansalva y sin reparos de ningún tipo. No se corta un pelo la tía. Ahora parece que me están empezando a dar pequeñas contracciones cuando estoy durmiendo a Leo en la cama, mientras mama... Sé que no debo preocuparme, pero mosquea un poco, la verdad. No quiero decirlo muy alto pero hace días que Leo no me muerde, hablando de teta. A veces se pone un poco pesado con lo de tocarme la axila mientras mama y eso me pone muy nerviosa, pero suelo poder evitarlo.

También estoy muy sensible, lloro por todo (me parezco a mi hijo, ejem). Pero sé que es normal, intento tomármelo con filosofía y tengo días buenos también. Me ayuda no estar sola con Leo, quedar con amigas, hacer cosas diferentes... Lo que pasa es que no es tan fácil, en mi estado no puedo darme grandes paseos, ni ir yo sola con el carrito subiendo y bajando de autobuses. En breve comienzo a ir con Leo a una pequeteca, dos tardes a la semana. Voy con otras mamás a las que conozco del curso pasado y sé que esto me va a ayudar a pasar las tardes de una forma más agradable al lado de mi hijo... ¡Hasta que mi barriguita diga basta, claro! También quería empezar a ir a nadar, pero estoy tan agotada que no sé si me conviene. Quizá me apunte a clases de yoga, una amiga que está embarazada me ha dicho que su profesora le adapta los ejercicios sin problema, y el gimnasio me pilla muy bien. Sólo tendrían que cuadrarme un poco los horarios. 

¡Ah, y me estoy sacando el carnet de conducir! Hace poco aprobé el teórico y he empezado esta semana con las clases prácticas... Me dan un miedo horrible los coches, así que lo paso regular, pero hoy ha ido mejor la cosa, no sé si porque voy perdiendo el miedo o porque iba más descansada (voy antes de comer). Espero que me dé tiempo a aprobar antes de parir, si no tendré que hacer un parón.

En fin, que entre unas cosas y otras, voy bien servida de estrés. Menos mal que mi chico me ayuda muchísimo y me hace la vida mucho más fácil. Los abuelos están ahí siempre y Leo... ¡bueno, Leo es Leo, pero sigue siendo adorable a pesar de todo!

Por cierto... seguimos sin nombre. Ains.

7 comentarios:

  1. Está bien que tengas ayuda para no agobiarte con el peque y así no cansarte tanto, además quedar con otras mamás siempre anima.
    Bueno, y a pesar de todo sacándote el carnet, genial.
    Espero que puedas descansar un poco más.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Yo hice natación embarazada, hasta la semana 39. Iba caminando a la pileta, y parecía que no podía más, que tenía que parar cada dos pasos. Pero en el agua es todo tan liviano, tan fácil...
    Un abrazo grande, y mucha suerte mañana!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo en mi primer embarazo también nadaba y nadaba, y me sentaba de perlas. Pero estoy tan cansada ahora que me apetece probar algo más relajado como el yoga. De todas formas dependerá de si tengo DG. Si es que sí, supongo que me iré a nadar, que me ayudó mucho con eso en el primer embarazo.

      Eliminar
  3. Hola preciosa!
    Aprovecha toda la ayuda que tengas que descansar es necesario. Mucho ánimo con el carnet, verás que bien te viene.
    Suerte en las pruebas, ya nos contarás.
    Un besazo!

    ResponderEliminar
  4. Yo en ambos embarazos hice natación de embarazadas y me vino genial, en este no va a ser posible.

    Besitos y suerte!!!

    ResponderEliminar
  5. Pues la curva larga ha ido de pena... ya os contaré. :-(

    ResponderEliminar
  6. Los padres luego nos sorprenden y se defienden mejor de lo que pensamos con los niños. Seguro que se manejó perfectamente. Graba un poco que te va a dar algo! Jajaja. Besos guapa.

    ResponderEliminar